A nivel mundial, los abonos verdes y los cultivos de cobertura
han demostrado ser una tecnología exitosa para mantener la fertilidad del suelo
y controlar las malezas. Las numerosas ventajas de estos cultivos han hecho que
sean adoptados en muchas partes del mundo por agricultores de bajos recursos.
Las principales ventajas
de estos cultivos son:
1.
Bajo costo inicial: una vez que las semillas se encuentran a
disposición del agricultor esta puede ser multiplicada para su propio uso o el
de terceros. De esta manera los cultivos de cobertura pueden llegar a sustituir
insumos externos tales como fertilizantes y herbicidas.
2.
Simplicidad: Esto ya que no son necesarios conocimientos o herramientas muy
sofisticadas para su éxito.
3.
Bajo Riesgo: El tamaño grande y la resistencia de las
semillas de muchas de las especies utilizadas, Facilita la siembra y reduce los
riesgos de establecimiento
4.
Versatilidad: Las especies utilizadas se adaptan a múltiples
condiciones ambientales.
5.
Variabilidad: Se puede escoger entre un amplio surtido
de especies la que mejor se adapte a los requerimientos del productor. Entre
estas encontramos plantas de duración estacional o perenne, habito postrado o
erecto, con vigor de crecimiento alto o bajo; tolerantes a extremos de frió,
Calor, sequía o inundación; modalidad de cultivo asociada, en relevo y
rotación.
¿Cuales son las funciones de los cultivos de cobertura?
Por lo general los cultivos de cobertura
causan un bajo interés en los agricultores, ya que estos, prefieren sembrar en su lote de terreno
cultivos para la venta o el autoconsumo,
antes que cualquier otro que solo sirva para la protección del suelo.
Entre las funciones adicionales que
podemos encontrar
1. Reducir costos: esto ocurre al disminuir la necesidad de
insumos externos como fertilizantes, herbicidas y alimentos animales. Además
debido al control que ejercen estos sobre las malezas se reduce también la mano
de obra necesaria en las labores de desmalezado.
2. Generar ingresos: por la venta de semillas y forrajes.
3. Incrementar la productividad: Aumentan la
fertilidad del suelo, reducen la competencia de malezas, incrementan la infiltración de agua;
producen alimentos para humanos y animales.
4. Reducir la degradación de los recursos
naturales: Reducen los residuos de agroquímicos, disminuyen la perdida de suelo por
erosión, Reducen la perdida de fertilidad, mejoran la infiltración de agua
reduciendo la escorrentía superficial y mejorando el estado de los acuíferos.
Algunas plantas utilizadas como cultivos de cobertura
Fríjol pardo (Canavalia ensimorfis).
Fríjol (Vigna ungiculada).
Fríjol terciopelo (Macuna ssp.)
Frijol pardo (Canavalia ensimorfis).
Quinchoncho o fríjol de palo (Cajanus cajan).
Frijol pardo (Canavalia ensimorfis).
Tefrosia (Tephrosia vogelli).
Mani Forrajero (Arachis pintoi)
Los cultivos de cobertura han demostrado ser una tecnología
versátil y adaptable, de interés particular para las familias agrícolas de
pocos recursos y de pequeña escala en América Latina. Sin embargo, antes
de promover la tecnología, es importante asegurarse que las condiciones
físicas, sociales, económicas y políticas son las apropiadas. Si esto ocurre,
los cultivos de cobertura se constituyen en un mensaje fácil de diseminar y con
muchos beneficios potenciales. Los cultivos de cobertura tienen un papel
importante en la transición de la agricultura de corte y quema hacia sistemas
estables y permanentes, especialmente aquellos que incorporan cultivos perennes
y ganadería.
Referencias Bibliográficas
BUNCH, R. 2004. Adopción de abonos verdes y cultivos de cobertura. [Online]. Consultado el: 30 de Mayo 2014. Disponible en: http://www.agriculturesnetwork.org/magazines/latin-america/4-rehabilitacion-de-tierras-degradadas/adopcion-de-abonos-verdes-y-cultivos-de-cobertura/at_download/article_pdf
POUND, B. 1997. Cultivos de
cobertura para la agricultura sostenible en América. [Online]. Consultado el: 30 de Mayo 2014. Disponible
en: http://www.fao.org/ag/aga/agap/frg/agrofor1/Pound7.htm